Thursday, January 06, 2011

un juez franquista --Adolfo Prego-- dictará la sentencia contra Garzón


¡IMPORTANTE!: un juez franquista --Adolfo Prego-- dictará la sentencia contra Garzón (1ª nota)


RecibidosX

Responder
bartolo historico para usuario

mostrar detalles 12:53 (hace 18 horas)



Esta es la primera de una serie de notas que iremos publicando, para intentar dejar debidamente claro --por si alguien aún tuviese dudas-- de que el actual Poder Judicial español está controlado por los herederos del régimen del Generalísimo, quien evidentemente cumplió con la palabra dada a los suyos: dejaré todo atado y bien atado.

Lo hacemos ante el manifiesto desenlace prestes a producirse en una de las tres causas que la Sala II del Tribunal Supremo ha abierto contra el juez Baltasar Garzón. Ya está circulando en los ambientes bien informados del quehacer jurídico que estos jueces han decidido condenar a Garzón por prevaricación, es decir, por --supuestamente-- haber actuado en abierta transgresión a La Ley, con plena consciencia de ello.

Para quienes no lo sepan esta causa se refiere a la investigación de los crímenes del franquismo, en el período que va desde la terminación de la Guerra Civil (1939) hasta 1975, el final de su larga dictadura (según algunos, se prolongó hasta 1977).

Garzón hizo diligencias orientadas a la investigación de dichos crímenes. Cabe aclarar que esas acciones no partieron de una decisión arbitraria del juez sino en ejercicio de sus funciones, obedeciendo al imperativo de la Ley de Memoria Histórica aprobada por el Congreso de los Diputados el 31 de octubre de 2007 (ver Wikipedia), con la obvia oposición del Partido Popular, a nuestro criterio manifiesto heredero (inconfeso) del franquismo. Dicho partido se expresó en estos términos: "El secretario de Comunicación del PP ha reclamado al Gobierno de Zapatero que retire el texto del proyecto de ley de Memoria Histórica "en su integridad" porque "no conduce a ninguna parte", o sólo a "reabrir conflictos afortunadamente ya cerrados"... según puede confirmarse en el vínculo: http://www.libertaddigital.com/sociedad/el-pp-pide-la-retirada-de-la-ley-de-memoria-historica-y-el-psoe-insta-a-rajoy-a-decir-menos-chorradas-1276294450/



La pregunta sería: ¿Garzón actuó de conformidad con La Ley, o la transgredió flagrantemente, como alegan sus acusadores? Las dos respuestas son jurídicamente correctas, todo depende de quién valore esa conducta. El "detalle" a tener en cuenta es que este encontronazo jurídico se debe al manifiesto conflicto frontal entre la Ley de Memoria Histórica de 2007 y la Ley de Amnistía de 1977. Garzón decidió actuar inspirado en la primera --de reciente aprobación y de manifiesto cuño democrático--, en tanto que el Tribunal Supremo exige que se dé preeminencia a la segunda, que garantiza la impunidad de los asesinos. ¿Por qué esta discrepancia?



Una breve explicación: la Ley de Amnistía de 1977 fue el equivalente a la "Ley de Punto Final" que impusieron los militares argentinos al gobierno democrático de Alfonsín. Según argumenta la derecha española --no sólo la del Partido Popular , sino también la del PSOE-- se trató de un "Pacto de caballeros entre vencedores y vencidos", en un supuesto gesto de equidistancia democrática, sin revanchismos.



Pero lo que estos demócratas no aclaran es que --tal y como sucedió en la Argentina con la de "Ley de Punto Final"-- esta Ley de Amnistía fue aprobada con una pistola en la sien de la sociedad española. Aunque Franco había muerto en 1975, la maquinaria franquista estaba intacta y sus integrantes en pleno ejercicio de sus funciones en el aparato del Estado. Como dato ilustrativo cabe recordar que cuatro años después --en 1981-- su poder aún era tal que consiguieron dar el golpe militar protagonizado por Tejero, conocido como del 23- F. Ver Wikipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/Golpe_de_Estado_en_Espa%C3%B1a_de_1981



El dato curioso es que ahora, en un sesgo más propio de los caprichos maquiavélicos que J.L. Borges atribuye al acaso, el resultado del sorteo judicial ha querido que el juez encargado de juzgar a Baltasar Garzón sea precisamente el más fascista de todos los que integran el Supremo: Adolfo Prego de Oliver y Tolivar, a quien sus camaradas de profesión, aprovechando el sonsonete lingüístico y en un guiño humorístico dada la orientación ideológica del susodicho, apodan "talibán" (por Tolivar).



Mañana enviaremos la 2ª nota, en la que intentaremos caracterizar con precisión a este troglodita, heredero de las más siniestras tradiciones nacionalcatólicas y militante del arcaísmo medieval, de profundas raigambre en los ámbitos del Poder Judicial de este país.



Por favor, lee --y si estás de acuerdo-- difunde estas notas. Tarde o temprano estos jueces que padecemos tendrán que ser cuestionados no sólo por la sociedad española, sino por la jurisprudencia internacional. Son los garantes del único genocidio impune en la Europa de la posguerra. Y los encargados de que aquello que es norma en Argentina, Chile, e incipientemente en Brasil y Uruguay --la investigación y procesamiento de los genocidas-- en España sea ilegal y merezca la destitución del juez que lo intente.





Buenafuente y el Tribunal Supremo: