Friday, November 12, 2010

En el cerro y en el llano (por todas partes los dejaron)






Fecha publicación: 12/11/2010




Exhumados los restos de varios represaliados en Gredos



“Para que tengan un enterramiento digno, no como perros”



Ávila Digital





Labores de exhumación en un paraje cercano al Parador de Gredos.

A sus 74 años, acudió al lugar donde fue enterrado su padre, al que no conoció por nacer a los 11 días de su muerte. Era una de las estampas observadas en la exhumación en Gredos de ocho represaliados en los comienzos de la Guerra Civil.



Los restos mortales fueron exhumados en una fosa localizada a 700 metros del Parador de Gredos (Navarredonda de Gredos), en unas labores impulsadas por el Foro de la Memoria de Ávila, que comenzaron este viernes. Se trata de siete vecinos de San Miguel de Serrezuela y uno de Martínez fusilados “extrajudicialmente” por un grupo de falangistas, según el presidente de esta entidad, Bruno Coca.



El fallecimiento de uno de ellos, Heliodoro García García, fue anotado en el Registro Civil de Navarredonda de Gredos como ocurrido el 28 de septiembre de ese año a “consecuencia del fusilamiento de la fuerza pública”, según la documentación aportada por el Foro, sin que se señale el lugar preciso. Los trabajos, que se prolongarán durante el fin de semana, han servido para encontrar un cráneo con un agujero de un disparo, varios huesos, casquillos de bala, restos de una cartera y suelas de calzado.



Más fosas

La fosa común, que se suma a otras dos en esta zona en la que pudieron ser asesinadas entre 50 y 70 personas, se encuentra en el paraje conocido como La Rastrilleja, a 700 metros del Parador de Turismo de Gredos, tal como desveló hace unos días el propietario de una finca próxima, al observar los trabajos de búsqueda por parte del Foro.



Según Coca, el cercano Parador de Turismo “fue utilizado como centro de represión por la Guardia Civil” de aquel tiempo en el que los fusilados fueron previamente encarcelados en la prisiones de Ávila y Navarredonda.



Los restos de los exhumados vecinos de San Miguel de Serrezuela son Juan Francisco García Gómez, de 35 años; Adolfo Vaquero Martín, de 62; Domingo Ortigosa Hurtado; Francisco Isidoro García Miguel, de 53; Fermín Chaves Vega, de 49; Heliodoro García García, de 34, y teniente de alcalde; y Benjamín Lorenzo Castaño, de 23, era el alcalde. Salvador Álvarez Hernández, de 36, era el vecino de Martínez.



Hija de Fermín Chaves, Anastasia, de 74 años, dejó escapar sus lágrimas por la “emoción después de tantos años de búsqueda”, y aclaró que no guarda rencor a pesar de no haber podido conocer a su padre, que se llevaron de su casa el 26 de septiembre. Ella había nacido unos días antes, el 15.



Soñaba con este día

Anastasia había soñado con “este día”, y confesó no haber podido dormir la noche anterior, “contenta” con hallar los restos de su padre, para el que deseó “un enterramiento digno, no como perros”. “Cuida de la niña, porque no sé si la volveré a ver”, le contó su madre que había dicho su progenitor cuando se lo llevaron.



Otra persona que asistió a la exhumación, desde Valencia, fue Isabel de la Cruz, de 50 años, nieta de Francisco Isidoro García Miguel, ebanista que fundó la Casa del Pueblo y que “enseñaba a leer y escribir a los niños”. En ella se unía “una emoción grandísima” con una “tristeza”, porque su madre, fallecida el verano, hubiera querido asistir a la recuperación de los restos de su esposo.



El Foro por la Memoria ha denunciado la aparición de los restos humanos ante la Guardia Civil y el Juzgado de Piedrahíta para que levante los cadáveres, tras lo que se realizará su identificación por parte del Instituto Toxicológico de Madrid.